Tradicionalmente han sido tres las funciones principales de nuestra propaganda: difusión del ideario anarquista, denuncia de todo aquello que la prensa burguesa silencia para defender el privilegio y el capital, y debate sobre los diferentes aspectos de la realidad y cómo incidir en ella.
La forma en que se presenta esta propaganda es diferente: panfleto, periódico, libro…
El anarquismo siempre ha incidido en el conocimiento como base para la libertad del individuo, capacidad de decisión y de transformación de la realidad. Y en esto también la propaganda tiene una labor importante.
En el acto que anuncia este folleto vamos ha hablar del periódico decano de la prensa anarquista de nuestro entorno geográfico más cercano, pero la prensa anarquista es más amplia y tiene gran valor para desarrollar lo anteriormente dicho: difusión, denuncia, debate y conocimento.
El motivo de la mayor difusión de la prensa sobre el libro es su mayor facilidad de edición y su coste mucho menor. El panfleto es una forma de propaganda más rápida que habitualmente suele ser de denuncia sobre algún hecho concreto.
Queremos resaltar que a finales del siglo XIX había más de cincuenta publicaciones anarquistas, que en su mayoría seguían una pauta: grupo anarquista, publicación y asociación.
El valor de nuestras ideas no está únicamente en su bondad, la realización práctica de las mismas que demuestra su viabilidad es fundamental, la demostración de que las relaciones humanas y la satisfacción de sus necesidades son posibles sin la mediación del Estado ni de ninguna institución. El dar a conocer estas ideas para que sean aceptadas por la sociedad, el mantener viva la llama es una tarea muy importante de la prensa en particular y de la propaganda en general.
Esperamos que este acto contribuya a acercarnos a una sociedad sin clases y por tanto sin privilegio, en donde cada cual pueda decidir por sí mismo según su libre voluntad.
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